Línea D recibe sistema de control CTBC

Nota divulgada por la empresa pública Subterráneos de Buenos Aires S.E. (SBASE) informa que desde 22 de agosto de 2022 hasta diciembre próximo,  la Línea D del Subte – el sistema de metro de Buenos Aires – modificará su horario de servicio debido a la obra de modernización del sistema de señales en esta vía.

De lunes a viernes se mantendrá el horario de inicio habitual a las 5.30 h y se finalizará media hora antes, a las 22.30 h. Los sábados iniciará a las 6:30 h y finalizará a las 22.30 h y los domingos funcionará de 8.30 h a 20.30 h.

Dice la nota que la Línea D es una de las más utilizadas de la red y está en proceso de modernización: cuenta con el 100% de su flota con aire acondicionado, se avanza en su repotenciación y se está reemplazando el sistema de señales actual, de tipo Automatic Train Protection (ATP), por un sistema Communications-Based Train Control (CBTC) – el mismo que ya funciona en las líneas C y H-, lo que brindará mayor regularidad al servicio.

La obra tiene un avance del 63% y apunta a finalizarse en 2023. En esta instancia, se deben instalar equipamientos en zona de vías, contadores de eje, cableados y bandejas, tareas que deben hacerse fuera del horario de servicio y por eso es necesario ampliar la ventana de trabajo nocturna.

IMPORTANCIA

Los sistemas de señalamiento son sistemas de control y protección de las formaciones, cuya función principal es que circulen de forma segura asignando rutas e informando la posición de los trenes para evitar colisiones, es decir que están vinculados a la seguridad y a la frecuencia del servicio.

Según explana la empresa Subterráneos de Buenos Aires S.E. (SBASE), el CBTC es un sistema de última generación cuya tecnología es adoptada por los subtes más modernos del mundo.

Trabaja mediante la comunicación entre formaciones, permitiendo el máximo acercamiento de forma segura y reduciendo el intervalo al mínimo posible. Además, este sistema determina con exactitud la ubicación de los trenes y controla la velocidad de circulación, y en caso de que sea superada se puede detener la marcha. De esta manera, se logra una operación más eficiente, con intervalos más cortos y con mayor seguridad para los usuarios y usuarias de la red.